La vicepresidenta de la República, Delcy Rodríguez, denunció que el 91% de los países con Medidas Coercitivas Unilaterales son productores de energía
Este martes, durante su intervención en el segundo y último día de jornada del Foro Mundial Parlamentario Antisfascista, que se desarrolla en el Centro de Convenciones del Parque Bolívar de La Carlota, en Caracas, la vicepresidenta ejecutiva de la República, Delcy Rodríguez, denunció que más de 30 países del mundo son víctimas, actualmente, de 37.433 Medidas Coercitivas Unilaterales (MCU), impuestas por el imperialismo y sus aliados para afectar a esos pueblos y vulnerar sus derechos humanos.
Respecto a lo anterior, resaltó “Esa es un política de exterminio. Más de 30 países ilícitamente sancionados, pero el 91 % de éstos son productores de energía y allí están concentradas las reservas energéticas más grande del planeta. Detras de estos bloqueos hay una política muy clara para apoderarse de los recurso de los productores de energía del planeta”.
Las MCU, han sido aplicadas a países productores de energía, como Rusia, Irán, Siria, Irak y Venezuela, acotó la vicemandataria.
A su vez, resaltó, que la resistencia del pueblo venezolano da lecciones al mundo frente a las agresiones de los poderes hegemónicos, así lo expresó durante su participación en el Foro Parlamentario Mundial Antifascista, que se realiza en Caracas. “La resistencia del pueblo venezolano da lecciones históricas al mundo, aquí levantamos las banderas de la soberanía y la autodeterminación de los pueblos”.
En su participación, aseguró que la humanidad vive grandes peligros, “y no hay que negar que el fascismo es una de las mayores amenazas que se cierne contra la especie humana”.
Seguidamente, manifestó que en Palestina ocurre «el peor genocidio a la vista, nunca se había visto, de una parte despiadada de quienes han dirigido esta política contra el pueblo de Palestina. El sionismo como concepto político-ideológico es un movimiento fascista que niega la vida, que no le importa el exterminio”, enfatizó.
La vicepresidenta enfatizó que la resistencia palestina “merece un aplauso de pie, y nuestro reconocimiento por su heroicidad demostrada cada segundo frente una de las políticas más terribles, la Organización de las Naciones Unidas, tiene una deuda con la causa palestina y lo que se ve es una organización que se marchita. Cada bomba que cae sobre Gaza, es una bomba que cae al Sistema Naciones Unidas”.
También destacó que en la resistencia palestina “hay un mensaje, que los pueblos del mundo no se deben rendir. No se rindan porque hay una esperanza, este es el mensaje que nos ha llegado al pueblo venezolano”.
Por último, Rodríguez envió un mensaje de solidaridad al pueblo de Valencia, en España, por las horas de angustia, dolor y sufrimiento que hoy viven. En ese orden de ideas, resaltó que aquellos que niegan la existencia de la emergencia climática planetaria, son los mismos que niegan la existencia del neofascismo y del neonazismo.
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