1 de abril de 2025

Venezuela agradece solidaridad de América Latina y el Caribe

El presidente constitucional de Venezuela, Nicolás Maduro, extendió su agradecimiento por la solidaridad manifestada por diversas voces en América Latina y el Caribe respecto, a lo que catalogó como “bochorno», al referirse al secuestro y desaparición forzosa de 324 migrantes venezolanos en El Salvador

Durante su intervención en la Reunión XXV del Consejo Político del ALBA-TCP, el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros, expresó su agradecimiento por la solidaridad manifestada por diversas voces en América Latina y el Caribe por el caso del secuestro y desaparición forzosa de 324 migrantes venezolanos en El Salvador. Al respecto, lo catalogó como “bochorno».

«Le agradezco la solidaridad compartida de múltiples voces en América Latina y el Caribe con el bochorno que se ha cometido», manifestó.

Del mismo modo, el primer mandatario informó que ha mantenido conversaciones con altos funcionarios de la Organización de las Naciones Unidas, incluyendo al Secretario General, António Guterres, y al Alto Comisionado para los Derechos Humanos, Volker Türk.

«A los dos les solicité diligencias como altas autoridades del sistema de Naciones Unidas para que el Gobierno de El Salvador corresponda judicialmente y entregue la lista de los venezolanos migrantes secuestrados», agregó, al recordarle al mundo que hoy se cumplen quince días desde la desaparición forzosa de estos venezolanos y venezolanas.

Migrantes no cometieron ningún delito

A su vez, el Ejecutivo nacional aseguró que estos migrantes «no cometieron ningún delito» y que «la inmensa mayoría de los que se sabe que están secuestrados» no han sido procesados por ningún crimen en Estados Unidos (EE. UU.).

También acotó que, a pesar de la falta de comunicación oficial sobre su situación, destacó que muchos de los jóvenes migrantes eran «barberos, músicos, artistas, comunicadores sociales, futbolistas, trabajadores en general».

El jefe de Estado denunció a las organizaciones mafiosas de trata de personas, dirigidas por extremistas de la oposición venezolana como Juan Guaidó, María Corina Machado, Julio Borges  y Leopoldo López, de haber promovido la migración como un «arma política».

«Todo esto que estoy diciendo tiene pruebas en los Estados Unidos; el FBI y la CIA tienen las pruebas de lo que estoy diciendo», declaró.