43 años del juramento de fortaleza y lucha por la Patria

_{El mandatario nacional subrayó que el pueblo venezolano, en especial el de Aragua cuna de Chávez, mantiene vivo el espíritu rebelde y bolivariano}

Caracas, 17 de diciembre de 2025. – El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, recordó este miércoles el histórico juramento pronunciado por el comandante Hugo Chávez hace 43 años bajo el Samán de Güere, símbolo de la resistencia y cuna de la Revolución Bolivariana. En un emotivo mensaje, el jefe de Estado exaltó el legado del líder revolucionario, cuyo compromiso marcó el inicio de la lucha por la liberación nacional.

En 1981, tras una jornada de reflexión, canto y entrenamiento militar, el joven Hugo Chávez, junto a sus compañeros del Movimiento Bolivariano Revolucionario 200 (MBR-200), juró ante este emblemático árbol: “Juro por el Dios de mis padres; juro por mi patria; juro por mi honor que no daré tranquilidad a mi alma ni descanso a mi brazo hasta no ver rotas las cadenas que oprimen a mi pueblo por voluntad de los poderosos. Elección popular, tierra y hombres libres, horror a la oligarquía”.

Este compromiso, destacó el presidente Maduro, se convirtió en la “piedra fundacional” de un proyecto que rescató la dignidad, la independencia y la soberanía de Venezuela, enfrentando las estructuras opresoras heredadas de la Cuarta República.

Mediante su canal de Telegram, reiteró que el Samán de Güere es el lugar donde “todo comenzó”, Asimismo, el mandatario nacional subrayó que el pueblo venezolano, en especial el de Aragua cuna de Chávez, mantiene vivo el espíritu rebelde y bolivariano. “Hoy seguimos reconstruyendo la Patria y ondeando las banderas de Bolívar, con la misma fuerza espiritual que nos legó nuestro Comandante”, afirmó.

En este sentido, subrayó que la Revolución continúa su marcha, fiel al juramento de justicia social y antiimperialista, enfrentando los desafíos con la misma determinación que inspiró la gesta del MBR-200.

El Ejecutivo nacional hizo un llamado a las generaciones actuales a honrar este legado: “Que el eco del trote y el canto de aquellos jóvenes revolucionarios nos guíe en la defensa de nuestra soberanía y en la construcción de un futuro de igualdad».